NOTA DE PRENSA ¿VALENCINA CALLADA?

A día de hoy el principal problema que tiene Valencina, mi pueblo, es recubrir el campo de fútbol municipal de césped artificial y los políticos municipales andan a la gresca por este tema tan fundamental para el devenir de mi pueblo. Es tan vital que los que mandan, el PSIV, utiliza a menores de edad para que presionen al PP y al PSOE y les aprueben la petición de un préstamo para pagarlo. Incluso recurren a la Justicia para meter en cintura a quienes osan criticarle, como le pasa a tres directivos del JD Valencina, que han sido elegidos por el PSIV como chivos expiatorios del “edicto” que hizo público la Directiva del club de fútbol criticando la utilización política de menores. Son así de melindrosos.
En Valencina no tenemos Centro de Día, nuestros mayores siguen prestados en un local que era para seis meses. No se ha entregado en plazo el nuevo Instituto de Enseñanza, la entrega era para Navidad del 2006, la Concejala ni sabe ni contesta, la Junta de Andalucía menos. El Consultorio sigue con goteras desde su inicio y no se arregla, ni Municipio ni Junta dan la cara. Las alumnas del Centro de Adultos tienen que calentarse un poco de café en el cuarto de baño, ni tienen espacio, ni suficientes enchufes, ni la luz tiene suficiente fuerza para aguantar dos estufas. Los chicos y chicas de las Escuelas Deportivas que compiten por Valencina carecen de un mínimo de uniformidad en los torneos que participan. La Casa de la Cultura y la Biblioteca necesitan de nuevos espacios para garantizar y mantener la calidad de los servicios que prestan. La iluminación de amplias zonas del pueblo es cada vez más escasa o nula, como ocurre en el campo de Feria o en el Polígono Industrial que linda con el Cementerio. El presupuesto de 2006 está en un limbo jurídico, como Guantánamo, debido a la “pericia” del Secretario Municipal; el correspondiente a 2007 ni se le espera. A los trabajadores municipales se les obliga a sindicarse a la UGT (sector OLIVO) si quieren conservar sus contratos. Los contratados municipales al servicio exclusivo del PSIV piden un contrato indefinido, mientras que la contratación temporal sigue siendo tan arbitraria que le sirve como granero de votos. De la clausura autoritaria de la radio municipal hemos pasado a un inicio clandestino de las emisiones, por supuesto al servicio del partido, el PSIV, y del alcalde, el Sr. Balseiro.
Como es posible apreciar, en Valencina hay más problemas y con más enjundia que el dichoso césped artificial, que costará al Municipio, como mínimo, 225.000 €, algo más de 37 millones de las antiguas pesetas, parafraseando a Toscano, sin incluir los intereses que generará el préstamo que habrá que pedir para afrontar el pago. Un dineral para un pueblo pequeño como el nuestro, con una serie de carencias importantes en dotaciones de todo tipo. Un lujo para que lo disfruten unos pocos, aunque dentro de esos pocos hayan chavales.
Todo esto del césped ocurre ante la proximidad de las elecciones municipales que les pone nerviosos porque carecen de una gestión que presentar. En estos tres años, más que gobernantes, se han limitado a ser azote de la oposición, sin percatarse que las necesidades reales del pueblo necesitaban la energía y la entrega que han inutilizado en oponerse a la oposición. Pero todo esto nos lo hubiéramos ahorrado si, en su momento, tanto el PP como el PSOE, hubieran tenido altura de miras, y después de reconocer sus errores y sus responsabilidades en el pasado, se hubieran puesto de acuerdo para expulsarles del gobierno municipal. Hubiéramos ganado todos. En fin, espero que cuando esta tarde llegue a casa no encuentre en mi buzón una citación judicial por haber sido crítico con la política del Gobierno Municipal Tránsfuga de Balseiro.